¿Cuál crees que es la crítica más importante que se hace a la ciencia desde el feminismo? (ver artículo de Pérez Sedeño)
Uno de los conceptos que más claros tenía antes de enfrentarme a esta asignatura de Introducción a la Filosofía de la Ciencia es que la ciencia no es en absoluto neutral, y que la actividad científica está condicionada por múltiples factores. Las fuentes de financiación, aunque se escondan tras epígrafes tan genéricos como Investigación Orientada a los Retos de la Sociedad favorecen unas investigaciones frente a otras y en muchos casos los propios sesgos de los científicos entran en liza.
En el caso del feminismo, este artículo me ha permitido aclarar algunas de las ideas que tenía consolidadas y profundizar en otras, proporcionando además un marco teórico y argumental que me parece sólido a la hora de analizar por qué es necesario revisar nuestras actividades científicas bajo el cristal de unas gafas violetas al menos de vez en cuando, para determinar si estamos siendo afectados, nosotros o nuestra investigación por un punto de vista predominantemente masculino.
En campos de investigación como el mío, la ciencia de materiales para aplicaciones de tecnología químicas, resulta complicado integrar una perspectiva de género en la investigación, y también encontrar si la metodología, las técnicas empleadas o los procesos de evaluación están afectadas por algún sesgo relativo al género o por el contrario esta aproximación queda fuera de nuestro ámbito de trabajo, al no tratarse de una investigación relacionada con las ciencias sociales o la investigación biológica. La mayor parte de los científicos (y científicas) del área se verán abrumados solo con pensar en estos concepto puesto que, tal y como describe la profesora Pérez Sedeño en su trabajo, la ciencia se asume como inseparable de esas cualidades. Sin embargo, parece imprescindible realizar un esfuerzo adicional para que en toda investigación se realicen aproximaciones desde puntos de vista diferentes (en género como en edad, formación, diversidad sexual, cultural o religiosa) pues la riqueza de las soluciones o explicaciones aportadas puede verse incrementada por cualquier formación previa de los participantes, y es así como entendería yo poder incorporar la experiencia a la investigación, en campos externos a las ciencias sociales o la filosofía.
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